Rastro, punto y aparte
Se remonta a mediados de 2022 cuando el asfalto de la calle García Cabrelles se levantó bajo la premisa de mejorar el camino tanto a viandantes como vehículos que circulan por la zona. Se estimaba que la conclusión de las obras se fijaría para julio de 2023. Cosa que, como se aprecia hoy en día, se ha diluido en el tiempo
Cambios de gobierno, roturas en las tuberías, obras que solapan unas a las otras, reacción tardía, acusaciones políticas y un largo etcétera conforman la interminable lista de contratiempos que han impedido que los plazos de este proyecto adjudicado por 3,5 millones de euros se hayan retrasado. Dejando los únicos afectados los comerciantes y habitantes de la zona.
Pese que la fase crítica de las obras haya pasado, aún no se sabe certeramente la conclusión de las obras. Con el cambio de sentido en la calle Gran Capitán y la apertura, a medias, del final de la calle García Cabrelles, la reforma de la zona se encuentra avanzada.
Aunque sigan las obras, el barrio del Rastro sigue resistiendo gracias a los residentes y comercios. También en parte a esas personas que están sentadas en las esquinas con sus pequeños comercios, que inician un largo coloquio con los dependientes en sus establecimientos. Asimismo, los locales que gozan de un té en las innumerables cafeterías afincadas en por el área, dotan el ambiente acoger que transmite el barrio.